Cráneo de un soldado localizado en superficie en el entorno de la batalla.
Durante el año 2012 llevamos a cabo una serie de intervenciones arqueológicas en los escenarios de la La Batalla del Ebro, financiadas por el Ministerio de Presidencia del Gobierno Central, que nos permitieron documentar los restos de hasta un total de 16 soldados y diversos escenarios de la contienda en el entorno de las localidades de Mequinenza y Fayón.
La Batalla del Ebro supone el enfrentamientodecisivo de la Guerra Civil ya que en ella se decideel derrotero final de la contienda. Es un episodio detremenda repercusión y redimensiona la perspectivasobre el desarrollo de la propia guerra. Es la batallamás sangrienta, más larga y más decisiva. Se desarrollageográficamente en torno al eje que supone el cauce delEbro y su valle, entre las localidades de Mequinenza,en Aragón, y la zona occidental de la provincia deTarragona. Cronológicamente estamos en el tramo finalde la guerra Civil, entre julio y noviembre de 1938.
durante el año 2012llevamos a cabo un amplio proyecto de investigaciónque finalmente nos permitió documentar diversasposiciones inéditas y restos materiales y humanos quehabían permanecido intactos desde el final de la guerra.
La tipología de los emplazamientos es tan extensacomo variadas pueden ser las circunstancias desu fallecimiento y así encontramos escenarios tandiferentes como las trincheras que se acabaronconvirtiendo en tumbas, cuando se aprovechaba lazanja para dejar allí a los muertos cubiertos con piedrasy tierra, o en fosas comunes si la ocasión l requería eincluso en algunos casos expuestos en superficie tal ycomo pasaron los últimos segundos de sus vidas.Durante los trabajos, llevamos a cabo un total dedieciséis intervenciones con resultado arqueológicopositivo, que nos ha permitido la recuperación delos restos de varios soldados fallecidos durante loscombates, abandonados tras la batalla y que hanpermanecido tal como cayeron hasta su exhumaciónhace una década.
Restos de un soldado en la posiciónen que falleció durante el asalto a la «Loma delas Ametralladoras»
Los vestigios de la guerra son una fuente directa deconocimiento que nos permite comprobar en primerapersona todo aquello que muchas veces los libros nopueden explicar. Contamos con numerosos estudiossobre este episodio de la guerra, no obstante, no sontantos aquellos que cuentan con la arqueología comobase de la investigación. El estudio de la materialidadde los escenarios de batallas contemporáneas nospermite alcanzar una perspectiva mucho más profunday real que la que nos pueden ofrecer los partes deguerra o las crónicas oficiales, generalmente redactadas por los vencedores y distorsionadas hasta la saciedad,sobre los verdaderos escenarios de las batallas. Los vestigios conservados de la guerra son mucho más queun activo patrimonial, contienen una lección de vida yun enorme potencial que no debemos desaprovechar.
Restos de un soldado de la 42 División del Ejército Republicano, en la trinchera donde falleció.
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